Parece que la semana va desarrollándose a pesar de la lluvia. En esta ocasión, nos trasladamos al vecino pueblo de Torrecampo para amenizar con nuestra música una vistosa procesión.
Hoy no estaremos en nuestro pueblo, pero seguro que pensaremos en él. Lo llevamos en nuestras galas, en nuestro estandarte y, sobre todo, en nuestros corazones. Allí donde vamos, Dos Torres nos acompaña y luce sus mejores galas. Lo damos a conocer por todas y cada una de las ciudades o pueblos que visitamos.
Por esto, hoy queremos dedicar esta procesión, a nuestro pueblo y a todos nuestros paisanos y paisanas. Sabed que a pesar de que hoy no nos tengáis cerca, tocaremos con fuerza y emoción para que nuestro sonido llegue, a través del viento, hasta las calles de nuestra localidad y a pesar de la distancia, disfrutéis con nosotros del orgullo de ser de Dos Torres.
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