Ayer, un año más y como siempre, volvimos a compartir con nuestros amigos del Cristo de la Salud de Aguilar de la Frontera, uno de nuestros ensayos, unos aperitivos y la firma oficial de un nuevo año de colaboración y disfrute de lo que mejor sabemos hacer por ambas partes.
Los unos organizar y llevar a cabo una de las estaciones de penitencia más acompañadas de público y más seguidas fervorosamente por paisanos y foráneos de toda la provincia de Córdoba.
Los otros, nosotros, elevar al cielo ese fervor, el entusiasmo y excelente trabajo de costaleros y costaleras y las oraciones de un pueblo que acompañado por nuestra música, cada Viernes Santo, desde hace ya muchos años, pide y agradece a este bondadoso Cristo un buen año para su salud y cosechas.
Como ellos y ellas dicen: ¡Viiiiiiiiva el Cristo de la Salud!
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